lunes, 1 de octubre de 2012

- Capítulo 1 -


Aquel chico abrió la ventana de su habitación, y una fría corriente de aire despeinó su oscuro pelo. Una lágrima cayó al alfeizar de la ventana donde pronto apoyaría un pie, inclinando su cuerpo levemente hacia afuera. Tomo aire y comenzó a balancearse suavemente, como si una mano tirase de el para salvar su vida y otra para acabar con ella. Un nuevo golpe de viento chocó contra él y sus manos cogieron con mas fuerza el marco de la ventana. Cerró los ojos mientras notaba como una lágrima tras otra recorría sus mejillas. Su cuerpo temblaba y respiraba considerando que tomaba las últimas bocanadas de aire de su vida. Deseaba tanto una mano que le agarrase a aquel mundo, alguien interesado en que siguiera vivo... “Vamos Changmin... no hay nadie... despídete de ti mismo si eso te hace sentir mejor...”. Una leve sonrisa amarga se dibujó en su rostro, sintiendo que el único interesado en él era el suelo que le esperaba plantas más abajo. Abrió los ojos lentamente y miró al cielo. El sol iluminó su rostro hasta ahora cubierto por las sombras de su pelo e hicieron relucir unos ojos brillantes, empañados en aquellas gotitas que poco a poco se habían decidido a no seguir apareciendo. Un susurrado "adiós" abandonó sus labios mientras se decidía a llevar su cuerpo hacia fuera sin detenerse a pensar un segundo más... Su cuerpo se inclinó y sus manos dejaron de agarrar el marco de la ventana... Su mente desconectó, y en aquel momento dio la historia de su vida definitivamente por terminada...

Tardó unos segundos en reaccionar. Abrió los ojos y se vio mirando a otros. Se encontraba tumbado en el suelo de su habitación mientras el chico que le sujetaba firmemente por la muñeca le miraba con los ojos desorbitados.

- ¡¿Se puede saber que haces?!

Aquel desconocido le pedía con exigencia una respuesta mientras fruncía el ceño. Sentía como le agarraba con más fuerza el antebrazo que aún le sujetaba y todavía se impresionaba de seguir sintiendo. Creía que para entonces ya no sentiría nada.

- ¿Estás sordo? Ah... ¡por Dios! ¡Que tú parecías cuerdo! No me hagas esto...

El muchacho le soltó en aquel momento y se puso de pie dándole la espalda. Avanzó hacia la ventana y la cerró echando el cerrojo. Se revolvió el pelo negro con una mano antes de volverse a girar hacia él.

- En menuda mierda de manicomio me han metido... La planta de los depresivos tiene ventanas sin rejas... - sin dejar de mirar a Changmin se sentó en el suelo apoyando la espalda en la pared observando como se enderezaba - Seguro que se te hacía hasta apetecible... ¿Llevabas mucho tiempo planeando hacerlo?
- ¿Có… cómo? - finalmente la voz hizo aparición por parte de Changmin – Yo no...
- Es que lo tenías muy fácil ... - el chico río sarcásticamente mientras contaba con sus dedos – Martes, miércoles,  jueves ...¡Tres días! Solo llevas tres días aquí y ya te ibas a tirar por la ventana. No me animas ¿sabes?
- Lo... lo siento... - empezó Changmin. Se le hacía tan irreal su propia voz en aquellos momentos que sentía que era un esfuerzo exagerado hablar.
- No pasa nada. Te perdono si no lo vuelves a intentar ¿de acuerdo?

Vio entonces como una dulce sonrisa se dibujaba en la cara de aquel chico que al terminar su frase le golpeó suavemente el hombro, como si tras regañarle se pudiera dar aquello por olvidado. Miraba sus ojos y veía tanta vida que sentía que seguía vivo porque le acababa de regalar un poco de ella.

- ¿Cómo te llamas? - le preguntó sacándolo de su pensamiento.
- Chang...Changmin... - respondió torpemente
- Jaejoong! Me alegra conocerte Chang-Changmin - dijo mientras le ofrecía su mano para estrecharla con la suya. Changmin tardó un poco en reaccionar pero terminó por tomar su mano, ante lo cual Jaejoong volvió a sonreír - ¡Ya hay alguien más loco que yo!

Sin poder evitarlo una sonrisa iluminó la cara de Changmin, que ni siquiera se había percatado de que estaba sonriendo.

- ¡Me he superado! - gritó de repente elevando los brazos- ¡He hecho sonreír a quien ni siquiera quería vivir! Y me tienen aquí por loco. Para mí que estoy aquí por demasiado valioso, me vaya a romper fuera ¡Ajajá!
- Gracias - Changmin sintió que derrochaba sinceridad.
- ¿Cómo? - Jaejoong bajo los brazos y le miró - No, gracias no, esta espero que me la devuelvas.
- Ah... espero poder hacerlo, si llega el mo-momento en el que tú me... necesites yo... yo ...- cogía aire a cada palabra que decía y no sabía a dónde debía llevar la frase.
- Ah, ya, ya , sí, sí, no te pongas novelero - soltó estas palabras con soltura a la misma vez que se levantaba del suelo - Ya es la hora de comer, ya me lo dirás luego que ni siquiera te escucho con el rugir de mi estómago.

Ofreció su mano a Changmin para ayudarle a levantarse y una vez ambos de pie comenzó a caminar hacia la puerta. Changmin le siguió por el pasillo a varios pasos de distancia camino al comedor.

- Mira ven, tú siéntate conmigo, por aquí. Deberías estar contento de poder comer como las personas. Los hay que comen en su habitación con ocho ojos vigilándole. Tú puedes comer como te salga ¡Bueno, no! No me hagas caso o terminarás comiendo en tu habitación. Creo que aún no has bajado a este comedor, ¿no? Porque nunca te he visto comiendo aquí… ¡Ah! - dijo mientras se volvía un segundo hacia él antes de seguir caminando - No jorobes que eres de los que comía en la habitación con vigilancia. Bueno, comer aquí no es un gran avance, no hay cuchillos y son todo cucharas. ¡Mola comer carne con cuchara! Aunque es ridículo porque también puedes matar a alguien con una cuchara. Y en cuanto a los platos...
- ¡ Dios, pero como hablas! - acto seguido rió y Jaejoong le acompañó.
- Pero te gusta escucharme ¿A que sí? - le mostró un gesto de victoria con dos de sus dedos extendidos en forma de uve, regalándose así la respuesta afirmativa - Sígueme, esta es la cola, coge una bandeja de ahí ¡Genial! ¡Entiendes rápido!
- Hombre, ¡no estoy tonto!
- Pero estás loco - dijo apuntándole con una cuchara a modo de navaja mientras entornaba los ojos.
- ¡Para ya! La cola avanza y estamos aquí parad-... ¡ah!

Alguien chocó contra él haciendo que su bandeja cayera al suelo. Se volvió rápidamente para encontrarse de cara con el culpable. Un tipo de mediana edad al que apenas llegaba a la barbilla le miraba como si el choque fuese culpa suya.

- La gente suele disculparse cuando se choca con otra... - dijo Changmin buscando romper el silencio.

Notó que Jaejoong le tiraba del brazo, alejándole un paso de él.

- ¿Qué haces, Jaejoong? - le preguntó extrañado - No puede ir como le de la gana...
- Changmin, déjalo, no olvides dónde estás - le insistió Jaejoong mirándole severamente.

Estaba dispuesto a hacerle caso cuando sintió como le sujetaban el brazo haciéndole girar bruscamente, topándose así nuevamente con la mirada del extraño. Aquel tipo le agarró del cuello de la sudadera, tirando violentamente de él hacia su cuerpo, y pudo ver de reojo como Jaejoong buscaba con la mirada algo en la sala. Pronto comprendió que buscaba ayuda al recibir el primer golpe en la cara que le hizo tambalearse quedando apoyado en el mostrador.

- ¡¡Changmin!! - exclamó Jaejoong mientras rápidamente se acercaba a él para evitar que cayera al suelo - ¿Estás bien?... ¡¿Dónde demonios está la ayuda?

Changmin se cubrió la cara con ambas manos mientras notaba el sabor a sangre en su boca. Miró de reojo buscando la silueta de su agresor con la vista nublada. Alcanzó a ver a Jaejoong que se enfrentaba a aquel tipo con una fiera mirada. Se interponía entre el extraño y él, intentando protegerle con su presencia, pero aquel tipo le ignoraba totalmente.

- ¡Tú! ¡Llama a alguien, joder!! - ordenó a una mujer que había en la fila -¡¡AYUDA!! ¡¡NECESITO AYUDA!!

Jaejoong cayó al suelo tras recibir un empujón y apenas tocó el suelo cuando volvió a levantarse.

- ¡Changmin muévete! - gritó ante la falta de tiempo para volver a hacer de barrera humana.

Pero fue tarde y Changmin se vio obligado a enderezarse arrastrando consigo varios platos que cayeron al suelo rompiéndose con un fuerte estruendo. Una mano rodeó su cuello adquiriendo poco a poco más fuerza, privándole de tomar aire. Miraba los ojos de aquel hombre y parecían tan vacíos que temía no volver a respirar de nuevo. Intentó deshacerse de su agarre pero resultaba totalmente inútil...

Comenzaba a marearse cuando, sin saber por qué, aquellas manos empezaron suavemente a soltarle. Su agresor comenzó a tambalearse de forma extraña hasta que cayó desplomado en el suelo. Entonces ante el apareció la imagen de Jaejoong que tembloroso sostenía un trozo de plato roto bañado en sangre, respirando con dificultad.

- Jaejoong... - no sabía qué decirle. Acababa de volver a salvarle la vida pero la imagen de todo era tan impactante que no sabía como reaccionar.
- Yo no… - susurró Jaejoong dirigiendo su mirada al arma que sujetaba en su mano.

Ambos permanecieron unos segundos en silencio, observándose como dos extraños, aquello que todavía eran.

- Tranquilo, suelta eso, no sucederá nada - dijo la voz de un encargado de seguridad a su lado - Suelta eso.
- Yo no le he matado... - empezaba a temblar descontroladamente.
- Claro que no, tranquilo, está vivo, le atenderán, suelta eso, vamos - le insistió el encargado.
- Jaejoong... - dijo Changmin haciendo que éste le mirase rápidamente - Haz lo que te piden por favor, no pasa nada, suelta eso ya - su voz sonaba tranquilizadora y su efecto inmediato hizo resbalar el trozo de plato hasta caer al suelo rompiéndose en trozos mas pequeños.

Acto seguido los encargados de seguridad presentes avanzaron hacia el y le tomaron de las muñecas, rodeándolas con una frías esposas.

- ¿Cómo? ¡¿Que estáis haciendo?! - se alarmó Changmin - ¿Qué?
- Esto es actuación rutinaria, no pasa nada, tranquilo - le respondió el primer encargado.
- ¿Rutinaria? ¿ Esposáis al que se ha defendido? No entiendo... - rió sarcásticamente y miró a Jaejoong que se mantenía en silencio.
- Ponte a la cola y come, tranquilo.
- ¿¿Queréis dejar de decir que me tranquilice?? - dijo apretando los dientes.
- Está bien, no lo haré mas, no pasa nada - le contestó un segundo encargado.

Chagmin no soportaba que le hablasen así, como si estuviese loco. ¿Que sabrían ellos acerca de él para tratarle así?

- ¿A dónde le lleváis? - preguntó con la máxima serenidad que pudo.
- No podemos dar cada dato de lo que se hace a los pacientes.
- Al menos podría saber qué hace un tipo como ese - señaló a su agresor que era atendido en el suelo por varios médicos - en el comedor común.
- Ha sido un fallo sin duda, todo esto se solucionará - le explico el encargado.
- Y empezáis por llevaros a Jaejoong a saber dónde, ¿ no? - volvía a ponerse nervioso.
- No pasa nada, tranquilo... - habló Jaejoong estrenándose en la conversación, sin mirarle, dándole la extraña sensación de que, realmente, no le hablaba a él.

Permaneció unos minutos en aquella cola con su cabeza siendo bombardeada por demasiados pensamientos y preguntas hasta que decidió volver a subir a su habitación. Se tumbó en su cama de costado dirigiendo su mirada hacia la ventana que minutos antes enmarcaba su final y se sorprendió de considerar la idea del suicidio como algo inconcebible en aquellos momentos. Llegó a pasar horas con la vista perdida en aquel plano, no deseando salir de aquella habitación ya que eso significaría visita al psiquiatra. Si querían darle ganas de vivir y sacarle del agujero en el que se encontraba, necesitaba de una persona que en aquellos momentos no estaba su lado y que sí que lo estaba en el momento en que se despertó boca arriba en aquella cama.

- Eh, ¿estás despierto? - susurró Jaejoong inclinado sobre él, sentado en el borde de la cama.

Changmin sintió un extraño calor en su cuerpo, como si la voz de Jaejoong le hubiese bañado en agua templada. Abrió torpemente los ojos y sonrió al verle tan cerca de él.

- ¡He vuelto! - exclamo mostrándole una amplia sonrisa.
- ¿Estás bien? - preguntó Changmin mientras se enderezaba - ¿A dónde te han llevado?
- Al país de nunca jamás - se miró las manos y le volvió a mirar a él - Me han llevado al psiquiatra, el que se encarga de mi. Le tengo tan visto que ya me sé que respuestas darle para que me deje ir. Es tan aburrido….

Jaejoong se dejó caer boca arriba en la cama junto a él que permanecía sentado.

- Estoy cansadísimo. Changmin, ¿tú crees que estoy chiflado? ¿loco? ¿ido?
- ¿Cómo? – “¿A qué que viene eso?”.
- A ver, yo creo que tú no lo estas. Estás triste, muy triste, y me gustaría saber por qué, pero es el primer día y quiero que salga de ti el contármelo.
- Y... ¿tú? ¿Por qué estás aquí? - preguntó Changmin sin poder disimular su curiosidad, no queriendo cavar más en su propia historia.
- ¡Vaya, qué directo!
- Lo siento...
- ¡No importa! - dijo con simpleza Jaejoong - La verdad es que no me acuerdo, y estoy aquí por eso.
- No entiendo...
- Yo tampoco...
- Esto es de locos - soltó Changmin - Qui-quiero decir ...
- ¡BINGO! Sí, es que esa expresión va al dedo.
- Pero, perdona que insista,  no tiene sentido, algo habrá, algo que ..
- Bueno, verás... - dijo tras enderezarse - Llevo años aquí, ¿sabes?
- ¿Que llevas años aquí? - Changmin no podía imaginarse como podía ser pasar por aquello - Años...
- Sí, creo que este es el tercero. Llevan tres años intentando que recuerde algo que hice y es bastante estúpido porque no se qué mierda puede ser... - hablaba con naturalidad como si hablase de cualquier cosa, con soltura - Me veo aquí años o averiguando qué hice y hacer como que lo recuerdo.
- Te ayudaré - dijo Changmin considerando totalmente necesario ofrecerse.
- ¿A averiguar por que estoy aquí? Joder, suena a detectives, puede estar bien, salir de la rutina me ayudará a no caer en la locura - bromeó comenzando a reír y provocándole la risa a Changmin.

Miraba a aquel chico de pelo oscuro y llegaba a ver tal perfección en él que creía haber conocido a su inspiración. Sacudió torpemente su cabeza intentando liberarse de aquellos pensamientos utópicos acerca de un desconocido, y procuró volver a la realidad, a su realidad.

6 comentarios:

  1. Ahhh este primer capitulo, lo que sufri y disfrute con el la primera vez que lo lei...y ahora claro pues no me acordaba mucho de como era...que recuerdos >o<

    Voy a seguir leyendo!!

    Lessien

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  2. Sí y justo aquí en este momento hace mucho tiempo atrás cuando leí el primer episodio que no pude detenerme, me quede prendida de la historia al minuto de iniciar y luego me desvelé para leer lo que más podía.
    Esta historia en especial me transmite esa sensación de lo incierto, de oscuridad y abismo, estos son tus personajes que con cada estrofa vivo con ellos en ese preciso lugar.
    Es tan hermoso volverlo a leer y saber que vas a estar aquí con nosotras, te estoy muy agradecida por volver..
    Más tarde sigo leyendo, ahora ya no dispongo de tanto tiempo como antes y debo hacer maravillas..
    Besos.

    Insatiable

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  3. Primera vez que leo este fic, y como todas las jaemin shippers estaban que se tiraban de un puente de felicidad (?, yo tampoco entiendo mi expresión ._.), decidi darle una oportunidad, y debo decir que me intereso bastante la historia, por lo menos es diferente a lo que acostumbro leer, lo cual es una alegría, el leer algo nuevo ^^

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  4. Ah.. podría leerlo cientos de veces y seguiría siendo especial<3
    Amo este fic... los dos tan :3
    Gracias por continuarlo ^^

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  5. desde el momento en que Jae salvo la vida de CM este le pertenecio... y cada latido en su pecho fue solo para el n.n ♥

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  6. Iihhh!!! ^^ 1er cap...y mis 2amores platonicos se conocieron....
    Q emocion....

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